El pasado martes, 1 de julio, tuvo lugar en la sede de la Reial Acadèmia de Medicina de les Illes Balears la sesión científica “Medicina basada en la evidencia: construyendo salud con ciencia desde Baleares”.

Abrió el acto el presidente de la corporación, Excm. Sr. Joan Besalduch Vidal, agradeciendo a las autoridades y al público su asistencia.

A continuación, el presidente cedió la palabra a la M. Il. Sra. Antònia Barceló Bennàsar que
presentó al ponente y realizó una primera introducción a la temática de la sesión científica.
La sesión científica fue llevada a cabo por el Dr. Ignacio Ricci Cabello, Investigador Titular del IdISBa, Investigador Principal (IP) del grupo de investigación Atención Primaria, Servicios de Salud, y Medicina Basada en la Evidencia (EVISAP) y Director del Grupo Cochran Islas Baleares -Red Cochrane Iberoamérica.

El Dr. Ricci expuso que La medicina basada en la evidencia es una corriente que se inició en los años 90 del siglo pasado en el Reino Unido y su impulsor fue Archie Cochrane, que dio nombre a la actual red internacional Cochrane.
Su filosofía promulga hacer el mejor uso posible de la evidencia científica disponible para
tomar decisiones en salud. Ahora puede parecer una obviedad, pero no siempre ha sido así.
Hoy en día hay un exceso de información en las redes sociales no siempre basada en la
evidencia científica contrastada, publicada y evaluada. Lo que hace esta corriente es actuar
como puente entre los ensayos clínicos y la aplicación de sus resultados, acercar la ciencia a la salud de la población.

El ponente explicó que la medicina basada en la evidencia tiene tres pilares fundamentales. El primero es el mejor uso de la evidencia científica disponible. El segundo es la experiencia clínica de los propios profesionales sanitarios y el tercero son los valores y las preferencias de los pacientes. En la intersección de esos tres conceptos es donde reside la medicina basada en la evidencia. Lo que pasa es que, hasta no hace mucho, el primer y el tercer pilar no se tenían tanto en cuenta. Se confiaba más en opiniones de expertos o en la experiencia de la práctica clínica de los médicos. Un médico se forma en base a los conocimientos de ese momento, pero la ciencia va avanzando y los conocimientos tienen que actualizarse.
Actualmente el personal sanitario se actualiza a través de las guías de práctica clínica. Aquí es donde entra la medicina basada en la evidencia y es parte de lo que hacemos en el Grupo Cochrane. Las guías de práctica clínica son una serie de recomendaciones que se dan a los profesionales sanitarios basadas en la mejor evidencia científica disponible. Hay guías para todas las patologías, encaminadas tanto a especialistas como a la atención primaria.

Estas guías son una herramienta de apoyo que se da al profesional y éste puede, o no, adherirse a ella o tenerla en mayor o menor consideración Las guías son generadas normalmente por asociaciones científicas. Muchas veces, cada gerencia pública crea una serie de protocolos en base a estas guías. Se supone que el profesional sí cumple esos protocolos. Así, los resultados de los estudios científicos pueden llegar a la práctica clínica. Al menos tenemos la garantía de que las guías, a través de los protocolos, llegan a los profesionales, aunque, como en todo, las hay mejores y peores.
El Dr. Ricci explico en la sesión en qué consiste el Grupo Cochrane. Se trata de una red
internacional, con presencia en numerosos países, para promover el uso de la evidencia científica en la toma de decisiones sobre salud. No sólo se trata de ayudar e informar a los sanitarios, también hay que hacerlo con la población. Cochrane trata de llegar a la población a través de redes sociales, boletines, medios de comunicación y otras vías más imaginativas, como en Barcelona, donde se planteaban preguntas sobre salud en carteles instalados en las marquesinas de los buses y las respuestas se encontraban en códigos QR.

En Baleares se fundó en octubre del año 2024. De momento, está compuesto de seis personas como miembros oficiales de Cochrane en las Islas. Se encuentra en una fase muy incipiente de darse a conocer y empezar a expandirse.

En España, Cochrane está implantado en muy pocas comunidades. Es un trabajo voluntario, no se cobra por ello. Se hace por convicción moral y porque está compuesto por expertos en evidencia.

Una vez finalizada la sesión científica se llevó a cabo el habitual coloquio entre el ponente y el público asistente.

Al finalizar el debate el presidente de la corporación agradeció al Dr. Ricci su magnífica ponencia y al público asistente su presencia en el acto.
Puede visualizar la sesión científica en el canal de youtube de la corporación en el siguiente enlace: